Los encantadores de serpientes

Mi querido y entrañable amigo Ernesto ante todo felicitarte por tu artículo, siempre te has destacado por tu gran agudeza y ahora no podía ser menos. Enhorabuena. Yo también, de forma mucho menos ilustre, quiero adherirme y hacer mías tus palabras y añadir que por un momento nos hemos dejado engañar por un espejismo con la esperanza de atisbar un rayo de luz. Pero ya hemos visto por enésima vez que no, que no es así. Que estos individuos son unos ENCANTADORES DE SERPIENTES, con su turbante y su chilaba es algo que salta a la vista. Y como DORAEMON hoy se sacan de su bolsillo mágico un teléfono directo con el poder para solucionar cualquier problema a cualquier hora y en cualquier sitio, pero eso sí, ha de ser su problema.